El tai chi es un arte marcial que se practica en la actualidad por millones de personas en todo el mundo. Desarrollado en China, ha sido exportado al resto del planeta por sus beneficios conocidos, tanto físicos como mentales. Ayuda a la relajación y la meditación, y sus movimientos suaves y fluidos facilitan la actividad del cuerpo sin forzarlo en exceso.
Recientemente se ha publicado un estudio en la prestigiosa revista Cell Transplantation que fue llevado a cabo por Shinn-Zong Lin, doctor del Centro de Neuropsiquiatría del Hospital Médico Universitario de China en Taiwán. Este estudio pone de pone de manifiesto que los beneficios del tai chi son realmente interesantes, llegando incluso a repercutir en la duración de nuestra vida. Según publica el estudio, Tai Chi Intervention Increases Progenitor CD34+ Cells in Young Adults, se ha demostrado que la práctica de este arte marcial incrementa el número de células CD34 (+), células madre que son fundamentales para para un número de funciones y estructuras del cuerpo, concretamente las relacionadas con la sangre y la autorenovación celular.
El estudio se ha realizado analizando durante un año a 3 grupos de jóvenes menores de 25 años a los que se les dieron actividades diferentes para hacer: a un grupo se le dijo de andar a paso ligero, a otro realizar tai chi y al tercero que no realizasen ninguna actividad física de ningún tipo. Las evidencias han venido a demostrar que la práctica del Tai Chi puede tener un efecto directo sobre el aumento de la longevidad pues se confirma que el Tai Chi tiene beneficios en pacientes con Parkinson entre leve y moderado y fribromialgia. Además, señalan posibles ventajas de este deporte chino en la reducción del dolor, prevención de caídas y mejora del equilibrio, la capacidad aeróbica, la presión sanguínea, la calidad de vida y la reducción del estrés según recoge el artículo de Heraldo.es. Sin duda, una muy buena opción para poner en marcha nuestro cuerpo.
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